miércoles, 14 de octubre de 2009

Hijo

Gabriel Ne Me Quitte Pas

Yo te esperaré, te cuidaré

Jugaremos juntos

Viviremos aventuras pero,

por favor no me abandones

No me abandones pequeño mío

En mis sueños te veo

Me das tu blanca mano

Te llevo por el sendero de la vida

Que sin ti empieza a no tener sentido

No me abandones pequeño mío

Quédate conmigo unos pocos días

Unas pocas horas

Deja que tu apuro se aleje solo

No me abandones Gabriel querido

Que hago solo en este inmenso vacío

Quédate conmigo unas pocas horas

Unos pocos días

Deja que los ángeles esperen un rato

Duérmete a mi lado

Toma mi vieja mano, vámonos jugando

Por esta vida a la que das sentido

Se que fui muy duro contigo

Nunca te di un abrazo

Tampoco sentiste mis labios

Sobre tu pálida frente

Los médicos dijeron que era mejor

¿para quién pregunto?

Moriste tan solo, tan sin besos

Sólo con tubos y mangueras…

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gabriel, es verdad que a veces parecen irse solos. Pero hay quienes les damos mimos, les contamos cuentos y les damos caricias mientras se encuentran entre tubos y mangueras...